Eva estaba en el patio enfocandose y olvidandose de todo; mirando las flores, cortando, y cultivando el jardin. Sono alguien en la puerta de su cerca. Ella se sorprendio cuando vio que era Manolo, porque mas nunce ella piensara que el iba llegar. Un poco ansiosa y timidosa le rectifico, "Mira como me tiene haciendo el trabajo de voz. Para que le pago?" El no dijo nada. Hizieron el amor alli en la tierra. Que sucia se puso: cubierta en lodo. Que loca se puso Eva. Fantasias o suenos no son iguales que a realizar las cosas; ella no paraba de llorar. Dio cuenta que estaba enamora de ese hombre. Mirandolo to' era Magdalena. La queria matar por vista de la puerta abierta--que piensara. Que complicada se hizo Eva.
Le garo su mano y lo llevo para la ducha. Se banaron juntos como dos primos hermanos de cuatro anos. Eva estaba despertandose, dandose cuenta de las consequencias, y reconsiliandose con lo que ha sucedido. En la ducha tenia los pantis puesto.
"Casi nunca hablamos. Llega, hace su trabajo, y se va." Manolo se quedo caiado. "De donde tu eres?" "De la Argentina." Eva le tocaba su pelo tan negro como azabache, y lizo como una seda planchada hasta la muerte--un hombre bello, masculino. "Tiene los ojos tan chinos?" "Y mi mama es Irlandesa."
"Yo lo sabia! Los Irlandeses son los chinos de Europa. Y tu papa?" "Vasco." (sonriente) "Entonces tu eres medio terrorista." (rematao) El no encontro el chiste tan gracioso. Eva le pego con un beso bien profundo. Salio de la ducha y se metio en la cocina para cocinarle algo.
Eva pensaba en su prima, Marta. Que puta era esa muchacha cuando era joven y ahora era una santa. Por buena forma Manolo pidio que Eva saliera a su van para recoger una ropa limpia. Ella se lo busco. Y tambien se le ofrecio lavarle la ropa sucia. Pero dijo questaba bien y la dio las gracias. Con cada siguiente minuto en la presencia de Manolo, Eva se sentia mas y mas angustiada.
"Te hize una tortilla pa' que lo lleves. Tengo que buscar mi nino." Se doblo los ojos y se puso una mueca; la pregunto si ella todavia queria seguir con los servicios jardineros. "Pues claro. Seguro." El se fue; ella se quedo en su casa vacia como una condenada en un hogar carcel pidiendole misericordia al Senor como si el nunca la conocido. Era un juego, era magnetismo, un destino, quisas impulsas destructivas, amor, o odio para ella misma, trajedia, o intentos para librarse?
Antes de recoger Abelito, Eva se sento enfrente su casa y converso un rato con Reymundo. En el barrio, todos querian el Romano. Que hombre mas noble, sensillo, servicial, y atento. Eva se sentia un pocito acompleja, y se comparaba mucho, pero sin ningunos celos. Estaba casao con su mujer por anos y tenian tres ninos. Dios les premio con gemelitos; y ademas, tenia la hembra. El le hacia sentir contenta, aceptada, y nunca habia ninguna falta de respeto. Pero Eva questiono a si misma si en algun momento el ha sido infiel a su mujer.
(Eva sits on her porch and envisions herself in a torment with Manolo--holding on to a dingy; he's floating far from her and looks at her [come to me], but she responds back, "No Way!")
Se desperto; llego Adan y se vio rabioso. "Que te pasa, amor?" "Manolo corto el arbol del patio?" Confusa le respondio, "No te intiendo?" "Tratao de comunicarme con el."
"Porque quieres cortar el arbol?" El sopechaba algo.
"Esta lleno de ratones. Nunca te fijao?"
"Pues, no. Pero, llame a Moises paque lo fumigues."
"Porque eso no sirve, amor! Despues de un rato se meten en la casa. Tenemos un nino, amor," dandola mirada como que la queria matar.
Al rato Eva dice, "Que no y se acabo! Hasta las gatitas quieren comer sus banquetas. Intendio?! Abel y yo pasamos bastante tiempo en la sombra de esta mata. Lo reconoces? El sol pica fuerte y ella nos proteja. Yo no voy a pasa todo mi tiempo en una casa vacia. Y se entro la casa.
Esa noche Eva durmio con su pelo suerto. Nunca lo ha hecho desde su nines. Siempre se acostaba con el pelo amarao en un mono. Se sentia comoda. Por la manana se veia espantosa; en el dia amaro la melena para presentarse bien frente la sociedad. En la noche anterior, Adan jugaba mucho con los pechos de su mujer. Abelito siempre jugaba con el pelo de su mama: lo jalaba hasta que ella gritaba dolor.
No comments:
Post a Comment